En la prisa de cumplir todas las tareas de cada día, terminar los pendientes y contestar correos, revisar el último video o link… ¿Cuándo vamos a ser felices?
Si no es aquí y ahora… ¿Cuándo?
Tal vez pensamos que va a llegar cuando nuestra vida mejore, cuando alcancemos nuestra meta, éxito en el trabajo, terminar la carrera, conocer a esa persona especial o tener un hijo. Tal vez llegue cuando salgamos de vacaciones o encontremos un tiempo para relajarnos. Tal vez mañana.
O… podríamos intentar lo siguiente:
- Disminuye tu velocidad en lugar de apurarte. Respira profundo.
- Toma una pausa y saborea el momento.
- Trata de percibir los detalles de cada momento y apreciar los pequeños sucesos.
- Agradece lo que tienes en este momento y en este lugar. Cuenta tus bendiciones.
- Permite que aquello que te molesta esté presente en tu vida sin resistirlo o tratar de pelear contra él.
- No permitas que las cosas pequeñas te molesten. No valen la pena como para arruinarte este momento.
- Permite que la belleza de este momento te cubra.
SI no practicas estar presente, bajar la velocidad, disfrutar el momento ahora, ¿Cuándo lo vas a hacer?
¿Qué practicas en este momento?
Empieza a vivir hoy… ahora.
Y recuerda:
“En este momento estás aquí, estás vivo, estás presente, eres bendecido” Fiji Mc Alpine.