Frecuentemente nos llega información de nuevas dietas, alimentos mágicos y maravillosos, historias de personas que perdieron peso con el menor esfuerzo, etc.
Es increíble la oferta de soluciones mágicas para tener una vida saludable, el problema es que la gran mayoría de estas estrategias están diseñadas vendernos algo antes que darnos un verdadero. Desgraciadamente ofrecen mentiras disfrazadas de actos de magia abusando de nuestro deseo de vivir mejor y en algunas ocasiones logran mal educar y confundir a aquellos que nos interesa alcanzar un peso saludable, tener una vida balanceada o tan sólo sentirnos mejor.
En esta ocasión he elegido las mentiras más comunes que han boicoteado nuestros intentos por mejorar nuestra calidad de vida:
¿Cuántas veces nos han vendido la idea de que si sustituimos un tiempo de comida (comida o cena) por una deliciosa ensalada de verduras, el camino a la delgadez está comprado?
Preparamos nuestra ensalada y la comemos con la esperanza de sentir el pantalón más flojo en unos días y nos topamos con la horrible sensación de hambre unos minutos después. Al pasar los días nos damos cuenta que nuestro peso sigue igual (o más alto), hemos sufrido hambre durante varios días y los resultados esperados nunca llegaron.
Lo que pasa con la ensalada es que no tiene los ingredientes necesarios para hacernos sentir satisfechos: proteína o grasas, por lo que “morimos de hambre” tan sólo unos minutos después de comerla y terminamos “picando” botanas o en la siguiente comida acabamos comiendo más. Otro error es el aderezo, preparamos ensaladas de hojas de lechuga con limón y agregamos varias cucharadas de ese delicioso aderezo que nos da 300 calorías y acabamos comiendo la misma cantidad de energía de una hamburguesa. Nuestro esfuerzo no valió la pena.
Tip: Incluye ensaladas en tu alimentación pero agrega algo de proteína como tofu, pollo, quesos frescos y una o dos cucharaditas de aceite o tu aderezo favorito.
Nuestra generación ha crecido con la creencia de que mientras más tiempo y esfuerzo, más saludables y delgados.
La revista Times publicó hace poco tiempo que el ejercicio en exceso (más de 45 minutos diarios), puede resultar contraproducente ya que aumenta tu hambre y acabas comiendo más calorías de las que quemaste.
Tip: Busca una actividad que te guste y practícala 3 a 5 veces por semana por 30 minutos, no es necesario inscribirse a un gimnasio, hay muchísimas opciones gratis como videos en internet que se pueden adaptar a tus horarios, habilidades y gustos.
Y por último, el descanso, éste es un ingrediente fundamental para alcanzar una buena calidad de vida y comúnmente lo dejamos de lado. Creemos que quedarnos en la cama una hora más los domingos va a compensar los 6 días que pasamos en vela trabajando.
Las actividades diarias (nos diviertan o no) generan un desgaste físico y emocional, si no aprendemos a reponer lo desgastado, el cuerpo nos cobrará la factura eventualmente. El descanso es un hábito que incluye la mente y el cuerpo. Es preferible dormir 30 minutos más al día que tratar de quedarse en la cama 3 horas más en un domingo.
Tips: Trata de irte a la cama 30 minutos antes de lo que acostumbras y lee un libro o tan sólo relájate. La meditación es una herramienta muy útil para darle descanso a la mente y no necesitas ser espiritual para obtener resultados.
Recuerda que un nuevo hábito se establece a los 6 meses de practicarlo, elige cambios sencillos y cómodos para que sean definitivos…