Antes que
nada, recuerda que para que un nuevo hábito permanezca debe ser despacio y
paulatino, platica con tu familia y hazlos parte del cambio, explícales tu plan
e involúcralos. Si todos participan, será más sencillo apoyarse y habrá menos
resistencia a comer saludable y mejorar su calidad de vida.
- Alacena saludable
Para lograr
comer más sano y no caer en las tentaciones, un principio muy sencillo es: NO
LO COMPRES.
- Educa a tu familia
Es muy
importante que incluyas a tus hijos en el proceso de elegir alimentos,
invítalos al súper y enséñales a elegir la versión más saludable de los
alimentos que les gustan. Déjalos elegir
las frutas/verduras, experimenta con ellos nuevas opciones.
Los niños que se
involucran en la compra del súper, después es más sencillo que se coman lo que
eligieron.
- Compra más frutas y verduras
Procura que
más de un tercio de tu compra consista en frutas y verduras, tu compra será más
barata y tendrás más ingredientes para preparar comidas y botanas con más
color, altas en fibra, vitaminas y minerales.
- Planea tus menús
Una vez a la
semana planea lo que vas a preparar para comer con tu familia y anticipa la
noche anterior el almuerzo de tus hijos, involúcralos al preparar el lunch para
la escuela y aprovecha para enseñarles a comer más sano y ligero.
Existen muchas páginas de internet donde
puedes encontrar miles de recetas sencillas y novedosas para tu familia.
- Tiendita escolar
Si tus hijos
llevan dinero a la escuela, invierte tiempo con ellos para explicarles qué es
mejor comprar en la tienda y con qué productos se sentirán más ligeros y llenos
de energía.
- Visitas en casa
Cuando
tengas visitas en casa o amigos de tus hijos, procura ofrecer botanas hechas de
frutas y verduras en lugar de comprar bolsas de frituras y aderezos.
Recuerda:
Buscamos hábitos a largo plazo desarrollados poco a poco. No es necesario que cambies radicalmente tus
alimentos, intenta hacerlo lo más lento posible para que el cambio no se vuelva
incómodo para nadie y que entre todos encuentren nuevas opciones de alimentos.
Espero que
estos consejos te sean útiles y que este regreso a la rutina sea un nuevo
comienzo de hábitos saludables.