¿Recuerdan
esta típica escena en la TV? La protagonista acaba de terminar una relación y
lo primero que hace es consolarse comiendo helado y viendo películas
románticas.
El
azúcar ha sido nuestra compañera desde que éramos pequeños; ha sido el premio,
la recompensa y más adelante el consuelo para superar problemas del
corazón. Y se preguntarán: ¿Por qué nos
gusta tanto?¿Por qué nos sentimos tan atraídos a un dulce o chocolate y no a
otro tipo de alimento?
Bueno, el consumo
de azúcar hace que el cerebro secrete sustancias que nos hacen sentir mejor
emocionalmente. También existe la teoría
de que comer azúcar de manera intermitente, puede cambiar tu conducta, a través
de hormonas relacionadas con adicciones como es la dopamina, creando
dependencia.
Conozcamos
un poco a este personaje:
El
azúcar inicia su carrera en el año 500 AC, en la India.
Su
nombre de pila fue “Khanda” (¿les suena a Candy?).
Se
hace famosa cuando se logra cristalizar en el SXVIII.
Su
descubrimiento cambió el curso de la historia humana: Se formaron nuevas
colonias, aumentó la esclavitud, migración de pueblos y guerras entre países.
En las
últimas dos décadas el azúcar ha dejado de ser tan política y ha entrado de
lleno al área de salud. El consumo de bebidas
azucaradas aumentó en un 135% entre 1977 y el 2001 y se considera una de las
causas de la epidemia de sobrepeso en el mundo, el cual va de la mano con
muchas enfermedades como presión alta, diabetes, depresión y cáncer.
Actualmente
1 billón de adultos en el mundo
sufren de exceso de peso… ¡Esto es equivalente a todos los habitantes del
continente americano!
Hagamos
un pequeño cálculo:
Una
lata de refresco promedio (360mL) tiene 150Kcal y 40-50g de azúcar lo cual
equivale a 5 cucharadas soperas de azúcar, si estas calorías se agregan a la
alimentación diaria…
¡Una
lata de refresco al día puede generar un aumento de peso de 6.75 Kg en 1 año!
Hace
tiempo tuve un paciente que tenía 10Kg de sobrepeso, debido a su trabajo le era
muy difícil hacer cambios en su alimentación, así que empecé por lo más
sencillo, cambiamos el refresco por agua.
En tan sólo 2 meses perdió cerca de 8Kg, él no daba crédito de que algo
tan “inofensivo” pudiera alterar tanto su peso.
Pero,
desafortunadamente, no sólo ingerimos azúcar cuando la agregamos al café o
tomamos un refresco, es impresionante la cantidad de alimentos desarrollados por
la industria alimentaria, que utilizan el azúcar para dar sabor, textura o
color a los alimentos, dale click aquí y conocerás dónde está oculta:
¿Suena
terrible no? Les propongo que esta
semana agreguen la mitad de azúcar a su café, tomen agua en lugar de refresco o
simplemente lean las etiquetas de los productos que compran.
La
buena noticia es que tampoco tienen que resignarse a una vida amarga, en el
siguiente blog les presentaré a un nuevo integrante de la familia de los
endulzantes, que les ayudará a perder peso de una manera natural y segura.
Y
para cerrar con broche de oro, los dejo con un lindo cortometraje...
Vasanti S Malik, Matthias B
Schulze, Frank B Hu Intake of
sugar-sweetened beverages and weight gain:a systematic review Am J Clin Nutr
2006;84:274–88.
Nicole M. Avena, Pedro
Rada, Bartley G. Hoebel,
Evidence for sugar addiction: Behavioral and neurochemical effects of
intermittent, excessive sugar intake, Neurosci Biobehav Rev. 2008 ; 32(1): 20–39.
Nicole M. Avena, Pedro Rada, Bartley G.
Hoebel, Sugar and Fat Bingeing
Have Notable Differences in Addictive-like Behavior, J. Nutr. 139:623–628, 2009.
Erik E. J. G. Aller ,
Itziar Abete , Arne Astrup , J. Alfredo Martinez, Marleen A. van Baak,
Starches, Sugars and Obesity, Nutrients 2011, 3, 341-369